Clara Campoamor, una mujer un voto

Clara Campoamor, una mujer un voto

Los avances a nivel laboral y social siempre han ido de la mano de hombres y mujeres que han logrado que todos nos beneficiáramos de sus conquistas en todos los ámbitos de la vida. Hoy me gustaría hablaros de Clara Campoamor, aunque sé que conocéis su figura, nunca viene mal recordar a esta abogada, política y feminista.

Cuando los términos feminismo, brecha salarial, techo de cristal, etcétera aparecen en todos los medios de comunicación y en las conversaciones cotidianas, echar la vista atrás para encontrar la inspiración en esas mujeres a las que debemos logros importantes, es necesario tanto para hombres como para mujeres.

Clara Campoamor fue la única sufragista que logró el voto femenino desde la tribuna de un Parlamento

El 12 de febrero de 1888, cuando Clara Campoamor vino al mundo, la mujer no tenía ni voz ni voto. El prototipo más frecuente fue el de perfecta casada, piadosa, buena madre y esposa. Este concepto correspondía a un discurso ideológico sobre lo doméstico. Pero Clara Campoamor no se iba a conformar con ese papel.

A comienzos del siglo XX, ella lo tenía claro: No se podía construir una república democrática sin la mitad de la ciudadanía

Con trabajos que compaginaba haciendo de secretaria en distintos periódicos pudo ahorrar el dinero suficiente como para iniciar sus estudios de bachillerato. Tenía 33 años. Tres años después se había licenciado en derecho.

Los estudios eran accesibles a la mujer pero ejercer, eso era otro cantar. Aunque nuestra protagonista aprobó unas oposiciones al cuerpo auxiliar de Telégrafos y posteriormente ejerció como profesora de taquigrafía y mecanografía. Y ya licenciada en derecho quiso ejercer como cualquier estudiante.

Los ciudadanosmayores de 23 años, tendrán los mismos derechos electorales conforme determinan las leyes

 

Abogada, feminista y política, Clara Campoamor y el sufragio femenino

El feminismo para Clara Campoamor no llegó por ser una idealista, que también, sino porque en su vida había aspectos muy duros que le obligaron a madurar muy pronto:

  • Quedó huérfana siendo una niña.
  • Tuvo que dejar la escuela.
  • Desempeñó diversos oficios: modista, dependienta de comercio y telefonista.
  • No se resignó a su destino y estudió siendo mayor

En cuatro años terminó bachillerato y la carrera de Derecho. Empieza su fama cuando actúa en dos casos de divorcio de dos personas famosas, el primero es entre la escritora Concha Espina y su marido Ramón de la Serna y Cueto y el segundo fue el de Josefina Blanco y el escritor Valle Inclán.

Algo tan normal hoy día, supuso que fuera castigada con la pérdida de cien puestos en el escalafón del Ministerio de Instrucción Pública, y ya no pueda trabajar como funcionaria nunca más.

Clara Campoamor consigue un escaño de diputada por Madrid

Con la instauración de la II República ingresa en el Partido Radical y es presentada a las elecciones para las Cortes Constituyentes de la II República. Obtiene un escaño de diputada por Madrid.

Son tres las mujeres que entran en el Parlamento español, la propia Clara Campoamor, Victoria Kent y Margarita Nelken. En ese momento, la mujer podía ser elegida diputada pero no podía votar.

A pesar de tener a mujeres en su contra porque opinaban que por ser influenciadas por los partidos de derechas y conservadores, debían transcurrir unos años para que éstas pudieran votar, Clara Campoamor no tiró la toalla y en El artículo 36º de la Constitución republicana queda así redactado:

“Los ciudadanos de uno u otro sexo, mayores de 23 años, tendrán los mismos derechos electorales conforme determinan las leyes”.

No fue fácil, su lucha no terminó ahí y peleó por establecer la NO discriminación por razón de sexo, la igualdad jurídica de los hijos/as habidos tanto dentro del matrimonio como fuera, el divorcio y el sufragio femenino. Es la primera mujer, que habla en las Cortes españolas.

Y a pesar de todo, aún queda tanto por hacer en cuanto a derechos de las mujeres, pero Clara Campoamor, es la prueba de que con trabajo, constancia y esfuerzo, todo se logra.

Buscar

¿Quién soy?

ALQUIEN QUE APUESTA POR LA ÉTICA SOCIAL Y LA IGUALDAD

En el ámbito profesional llevo más de trece años trabajando en diferentes empresas y en distintos puestos. Este bagaje me ha ayudado a aprender y a conocer de primera mano muchas historias en primera persona, quizás alguna similar a la tuya.